¿Cuáles son los tratamientos para el fibroma plantar?

Un fibroma plantar es una masa de tejido fibroso que se desarrolla en el arco del pie. Esta masa suele causar dolor y molestias aunque sea benigna.

Los fibromas plantares afectan con más frecuencia a los hombres que a las mujeres y suelen aparecer en personas de mediana edad o mayores.

Con menor frecuencia, algunas personas pueden desarrollar varios fibromas en el pie, una condición conocida como fibromatosis plantar.

Sigue leyendo para saber más sobre los síntomas y tratamientos de un fibroma plantar.

¿Cuáles son los síntomas?

No se conocen las causas del fibroma plantar.

El síntoma principal es un bulto (fibroma) de crecimiento lento en el arco del pie. Suele medir menos de 2,5 cm de tamaño.

El bulto puede causar inicialmente poco o ningún dolor o molestia. Pero el fibroma puede aumentar de tamaño o pueden aparecer otros fibromas cercanos con el tiempo. Los bultos más grandes suelen ser dolorosos.

El dolor puede empeorar cuando:

  • aplicar presión sobre el bulto
  • usar zapatos restrictivos
  • caminar descalzo
  • estar de pie durante mucho tiempo

Causas

Se desconoce la causa del fibroma plantar.

¿Podría ser genético?

Algunas investigaciones indican que la genética puede desempeñar un papel. Los fibromas plantares son más comunes entre las personas de ascendencia europea del norte y rara vez afectan a las personas de ascendencia asiática.

¿Son los traumatismos un factor?

Algunos expertos creen que un traumatismo físico en el pie puede ser un factor en el desarrollo de un fibroma plantar.

Las lesiones repetitivas del pie pueden provocar el desgarro de la fascia del arco, lo que favorece el crecimiento de los fibromas.

La Sociedad Americana de Ortopedia del Pie y del Tobillo, sin embargo, descarta los traumatismos como factor de crecimiento de los nódulos.

¿Puede contribuir el estilo de vida?

La investigación ha relacionado varias condiciones médicas y opciones de estilo de vida con el desarrollo de un fibroma plantar. Sin embargo, el estudio añade que estas condiciones probablemente contribuyen a un fibroma plantar en lugar de causarlo directamente.

Las condiciones incluyen:

  • enfermedad hepática crónica
  • diabetes
  • epilepsia
  • abuso de alcohol a largo plazo

También existe una asociación entre el fibroma plantar y algunos medicamentos y suplementos, incluyendo:

  • medicamentos anticonvulsivos, como la fenitoína
  • betabloqueantes para la presión arterial alta
  • glucosamina y condroitina
  • vitamina C (en grandes dosis)

¿Hay alguna complicación?

Los fibromas plantares pueden causar complicaciones aunque sean benignos.

Dificultades para caminar y estar de pie

Si un fibroma crece mucho o si se desarrollan múltiples fibromas, puede afectar a la forma del arco del pie, provocando dificultades para estar de pie o caminar.

Intervención quirúrgica

En ocasiones, la persona necesitará una intervención quirúrgica para eliminar la masa. Como ocurre con cualquier intervención quirúrgica, existe el riesgo de que se produzcan complicaciones, como una infección. También existe el riesgo de que el fibroma vuelva a aparecer.

Diagnóstico

El fibroma plantar puede ser diagnosticado por un médico.

Un médico puede diagnosticar un fibroma plantar examinando el pie de una persona. En algunos casos pueden ser necesarias pruebas adicionales.

Durante la exploración física, el médico presionará el fibroma y la zona circundante. Comprobará si hay dolor y evaluará la capacidad de la persona para estar de pie y caminar cómodamente.

El médico puede solicitar más pruebas, como una radiografía y una resonancia magnética para descartar otras afecciones del pie:

  • quistes
  • infección
  • inflamación de los tendones
  • rotura de tendones
  • tumores

¿Es necesaria una biopsia?

No suele ser necesaria una biopsia, excepto cuando las exploraciones de imagen indican que el bulto puede ser canceroso.

Una biopsia consiste en extraer una muestra del tejido del nódulo para comprobarlo al microscopio.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento?

El tratamiento tiene como objetivo aliviar el dolor y reducir el tamaño de la masa. Los fibromas plantares pequeños que no causan síntomas pueden no requerir ningún tratamiento.

Las opciones de tratamiento para los fibromas más grandes o dolorosos incluyen:

Gel tópico

Un gel tópico trata el fibroma plantar deteniendo el crecimiento del tejido de la fibrosis. Algunos geles afirman que pueden aliviar el dolor a los pocos meses de uso. Las pruebas de su eficacia son limitadas.

Inyección de corticoides

La aplicación de una inyección de esteroides en la masa puede reducir el dolor y la inflamación, lo que puede permitir a las personas estar de pie y caminar con mayor facilidad.

Una inyección de corticoides suele considerarse una solución temporal porque no impide que el fibroma siga creciendo.

Plantillas y almohadillas ortopédicas

El dolor causado por un fibroma puede aliviarse usando una plantilla o almohadilla para el calzado. Estas plantillas ortopédicas redistribuyen el peso del cuerpo por todo el pie para reducir la presión sobre el arco y el fibroma.

Las plantillas ortopédicas pueden adquirirse sin receta médica (OTC) o hacerse a medida.

Fisioterapia

Los ejercicios de estiramiento y fortalecimiento ayudan a:

  • reduciendo la inflamación
  • aumentar la circulación del pie
  • fomentar el crecimiento de nuevas células

Un fisioterapeuta puede desarrollar un programa de ejercicios para personas con un fibroma plantar.

Cirugía

La fisioterapia puede ayudar a reducir el dolor al aumentar la circulación.

La cirugía puede ser necesaria en algunos casos, sobre todo si una masa fibrosa sigue creciendo en tamaño o causa un dolor y molestias cada vez mayores.

Sin embargo, la extirpación quirúrgica de un fibroma puede aumentar el riesgo de que se desarrollen otras afecciones del pie, como el pie plano y el dedo en martillo.

La cirugía suele considerarse sólo después de que hayan fracasado otros tratamientos.

La recuperación de la cirugía puede durar hasta 8 semanas. Existe el riesgo de que el fibroma reaparezca tras la cirugía, especialmente en los casos de nódulos múltiples.

Remedios caseros

Los remedios caseros para el fibroma plantar se centran en aliviar el dolor y las molestias. Incluyen:

Hielo

Aplicar una compresa de hielo en el pie puede disminuir el dolor y la hinchazón. Para hacer una compresa fría, envuelva cubitos de hielo en un paño fino y colóquelo en el arco del pie durante un máximo de 15 minutos. Repita el tratamiento varias veces al día o según sea necesario.

Elevación

Elevar el pie afectado por encima del nivel del corazón puede reducir la inflamación y la hinchazón. Esto se puede conseguir tumbándose y apoyando los pies en almohadas siempre que sea posible.

Analgésicos de venta libre

Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) de venta libre son otra opción para las personas con dolor de pies. Estos medicamentos incluyen:

  • ibuprofeno (Advil, Motrin)
  • paracetamol (Tylenol)
  • naproxeno sódico (Aleve)

Los AINE no deben tomarse a largo plazo, ya que su uso excesivo puede provocar efectos secundarios graves.

Conclusiones

El pronóstico para las personas con fibroma plantar depende de varios factores, entre ellos:

  • el tamaño del fibroma
  • el número de nódulos presentes
  • el nivel de dolor experimentado

Los fibromas pequeños no suelen causar síntomas. Los crecimientos más grandes pueden causar un dolor persistente y afectar a la capacidad de movimiento de la persona.

Los fibromas no desaparecen sin tratamiento. Las opciones incluyen geles tópicos, inyecciones, aparatos ortopédicos, ejercicios y cirugía. Los remedios caseros, como el hielo y la elevación, pueden reducir el dolor.

Aunque la reaparición del fibroma suele ser poco frecuente, las personas con múltiples bultos son más propensas a experimentar un retorno de la afección, incluso después de un tratamiento exitoso.