¿Qué puede causar un dolor nervioso en el pie?

El dolor nervioso puede ser consecuencia de un nervio pinzado o de una enfermedad crónica, como la diabetes.

Cualquier dolor de pies puede tener un impacto significativo en la vida diaria, y el dolor nervioso no tratado puede impedir que una persona disfrute o realice sus actividades habituales.

A continuación, conozca cómo se siente el dolor de nervios en el pie, qué puede causarlo y qué tratamientos hay disponibles.

Síntomas

Independientemente de la causa del dolor, alguien con dolor nervioso en uno o ambos pies puede experimentar:

  • una sensación de ardor, dolor u hormigueo
  • la sensación de una descarga eléctrica en el pie o los pies
  • dolor que empeora durante la noche o en actividades específicas
  • debilidad muscular en la zona

Además, el mismo problema que causa dolor en los nervios puede causar alternativamente entumecimiento.

Causas

Los siguientes problemas de salud pueden provocar dolor nervioso en uno o ambos pies.

Neuropatía de Baxter

La neuropatía de Baxter es una forma de atrapamiento nervioso. Se produce por la compresión del nervio calcáneo inferior, que se encuentra justo debajo de la base del arco del pie.

Los factores de riesgo son:

    • fascitis plantar: inflamación de la fascia plantar, la parte de los pies que conecta el hueso del talón con los dedos
    • obesidad
    • espolones óseos

pies planos, o arcos caídos

neuroma de Morton

El neuroma de Morton consiste en tejidos engrosados que comprimen los nervios entre los dedos del pie.

Una persona puede experimentar un dolor en la parte inferior del pie que empeora al caminar, particularmente con tacones altos y apretados. El dolor puede desaparecer durante el reposo o después de quitarse los zapatos.

 

El dolor puede ser ardiente, punzante o de hormigueo, o puede sentirse como una descarga eléctrica. Puede extenderse a la parte posterior del pie o la pierna, causando calambres. Algunas personas también experimentan entumecimiento entre los dedos de los pies.

Las causas más comunes del neuroma de Morton son:

  • el uso de zapatos estrechos
  • el uso de tacones altos
  • inflamación de las articulaciones
  • engrosamiento de los ligamentos del pie
  • lesiones en la parte delantera de los pies, como las producidas por los deportes de alto impacto o el footing
  • lipomas: bultos bajo la piel que contienen un crecimiento excesivo de células grasas

Síndrome del túnel tarsiano

El síndrome del túnel tarsiano provoca dolor en los pies y las piernas debido a la compresión del nervio tibial posterior, que baja por la parte posterior de la pierna, o de los nervios plantares de los pies.

En la actualidad, los investigadores desconocen la frecuencia de esta afección, ya que los médicos suelen subdiagnosticarla. Sin embargo, parece ser más común en las mujeres.

Los síntomas del síndrome del túnel tarsiano son:

  • dolor agudo y punzante en la parte interna del tobillo y a lo largo del pie
  • adormecimiento en la parte inferior del pie
  • dolor al flexionar y mover el pie
  • sensación de hormigueo o ardor

Los síntomas pueden empeorar por la noche, al caminar o estar de pie, o después de la actividad física. El dolor suele disminuir después de descansar.

El síndrome del túnel tarsiano puede ser consecuencia de:

  • el uso de zapatos mal ajustados
  • lesiones en los pies o las piernas
  • desarrollar cicatrices posquirúrgicas
  • tener varices
  • tener un quiste ganglionar
  • tener lipomas

Neuropatía periférica

La neuropatía periférica es un término general que designa el entumecimiento, el hormigueo y la sensación de quemazón en los dedos de los pies, las manos o una combinación de estas zonas. Los síntomas pueden empeorar por la noche.

Además, la neuropatía periférica puede causar síntomas inespecíficos que dificultan el movimiento de los pies y las actividades básicas.

Los investigadores no comprenden del todo por qué ciertas personas desarrollan una neuropatía periférica y otras no.

Sin embargo, han identificado condiciones que aumentan las posibilidades de desarrollar una neuropatía periférica. Estos problemas de salud incluyen:

    • infecciones
    • la deficiencia de un nutriente, como la vitamina B12
    • trastorno por consumo de alcohol
    • diabetes
    • ciertas afecciones hereditarias, como la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, que provoca una pérdida de tejido muscular

el síndrome de Guillian-Barré, una enfermedad que provoca una rápida debilidad muscular

Neuropatía diabética

Tanto la diabetes de tipo 1 como la de tipo 2 pueden causar dolores nerviosos en los dedos de los pies y en los pies. La neuropatía diabética afecta a más del 90% de las personas con diabetes.

Normalmente, el dolor nervioso afecta primero a los dedos de los pies y a las zonas circundantes, y luego puede extenderse lentamente al resto de los pies y a las piernas.

Los síntomas de la neuropatía diabética incluyen:

  • hormigueo, ardor, dolor agudo o punzante en los dedos o en los pies
  • la sensación de una descarga eléctrica en estas zonas
  • dolor que suele empeorar por la noche, provocando alteraciones del sueño
  • dolor al tocar la piel

Los investigadores siguen sin conocer las causas exactas. Algunas teorías apuntan a cambios en los vasos sanguíneos, el metabolismo, el sistema inmunitario o los canales de sodio y calcio del cuerpo.

Varios factores aumentan las posibilidades de que las personas con diabetes desarrollen una neuropatía:

  • la edad avanzada
  • tener diabetes durante un período más largo
  • consumir alcohol
  • consumir productos del tabaco

Ciática

La ciática se produce cuando algo daña o comprime el nervio ciático, el más largo y ancho del cuerpo. Se extiende desde la parte baja de la espalda, pasando por las nalgas y bajando por las piernas, terminando justo debajo de la rodilla.

La causa más común de la ciática es una hernia de disco, o una protuberancia, en la columna vertebral.

 

Aunque la ciática tiende a afectar primero a la espalda, las caderas y la parte superior de las piernas, el dolor puede extenderse por las piernas hasta los pies y los dedos.

Los síntomas de la ciática incluyen:

  • dolor de espalda en un lado
  • dolor o sensación de ardor en las nalgas
  • debilidad en las piernas
  • dolor en la pierna y el pie

Tratamiento

Los siguientes enfoques pueden ayudar a aliviar el dolor de los nervios en los pies.

Estrategias de cuidado en el hogar

Una persona puede beneficiarse de:

    • utilizar compresas calientes o frías
    • descansar
    • tomar medicamentos de venta libre para aliviar el dolor, como el ibuprofeno (Advil)
    • masajear los pies

usar una férula de apoyo

Además, trate de evitar estar sentado o de pie durante mucho tiempo.

Algunas personas consideran que llevar zapatos anchos, de suela blanda y con cordones, con tacones bajos, ayuda a aliviar la presión sobre los pies y los nervios.

 

Sin embargo, para algunas personas con dolor nervioso, una suela firme puede ser más beneficiosa que una suela blanda.

Tratamientos médicos

El mejor enfoque depende de la causa del dolor nervioso.

Para tratar la neuropatía periférica o diabética, los médicos pueden recetar:

  • medicamentos para aliviar el dolor
  • antidepresivos
  • anticonvulsivos

En algunas situaciones, el médico puede recomendar masajes de tejido profundo e inyecciones de corticosteroides para ayudar a controlar los síntomas, especialmente si la causa es la ciática.

Si la ciática es consecuencia de una hernia, un absceso o un tumor, el médico suele remitir a la persona a una intervención quirúrgica.

Los médicos también pueden recomendar la fisioterapia, ya que estirar y fortalecer las piernas y los pies puede ayudar a controlar los síntomas, incluido el dolor.

La cirugía también puede beneficiar a las personas con dolores nerviosos causados por cuestiones distintas de la ciática. Por ejemplo, si una persona tiene el síndrome del túnel del tarso, el tratamiento puede consistir en una cirugía para liberar un nervio. La tasa de éxito es de hasta el 96%.

Diagnóstico

En primer lugar, el médico realiza un historial y examina la zona dolorida. También puede solicitar imágenes, como una ecografía o una resonancia magnética.

Si se sospecha de alguna afección específica, como una neuropatía periférica o diabética, el médico puede solicitar la participación en un estudio de conducción nerviosa o muestras de sangre y de otro tipo para realizar pruebas de laboratorio.

Cuándo contactar con un médico

Si el dolor de pies amenaza con impedir que una persona realice sus actividades cotidianas, debe hacérselo saber a un médico.

Esto es especialmente importante si una condición subyacente, como la diabetes, puede estar contribuyendo al dolor y otros síntomas.

Conclusiones

El dolor nervioso en el pie tiende a ser el resultado de un nervio comprimido o de la diabetes. Puede haber una serie de problemas de salud que tienden a causar síntomas similares.

Por este motivo, es fundamental recibir un diagnóstico. Es especialmente importante ponerse en contacto con un médico si el dolor empeora o las técnicas de atención domiciliaria no consiguen aliviarlo.

El médico trabajará con la persona para desarrollar un plan de tratamiento eficaz. Cuando es necesaria, la cirugía suele tener un alto índice de éxito.