Todo sobre la metatarsalgia

La metatarsalgia es una condición dolorosa que afecta a la bola del pie. Los metatarsianos son huesos que conectan los dedos del pie con los tobillos.

Puede ser consecuencia del uso excesivo o de deportes de alto impacto, de la artritis y del uso de calzado inadecuado, como los zapatos de tacón.

Tratamiento

El uso de plantillas puede dar soporte al pie y reducir el dolor.

El tratamiento se centrará principalmente en aliviar las molestias y el dolor.

Esto puede incluir:

  • aplicar hielo en la zona varias veces al día, cada vez durante 15 o 20 minutos con el hielo envuelto para proteger la piel. Las bolsas de hielo se pueden comprar por Internet.
  • utilizar antiinflamatorios de venta libre, como el ibuprofeno, para reducir la inflamación y aliviar el dolor
  • mantener la presión de los pies, y mantener los pies en alto cuando se descansa

Las estrategias para apoyar el pie incluyen el uso de almohadillas metatarsales o una barra metatarsal para reducir la presión de los huesos metatarsales, y plantillas amortiguadoras o soportes de arco para aliviar la presión al caminar.

En los casos más graves, el médico puede recomendar inyecciones de esteroides para reducir el dolor y la inflamación.

Las estrategias para reducir el riesgo de desarrollar metatarsalgia incluyen el uso de ropa adecuada para los pies.

Deben evitarse los zapatos de tacón alto. Los zapatos no deben ser demasiado apretados y deben tener un apoyo y una amortiguación adecuados, preferiblemente con una puntera ancha. Las plantillas acolchadas pueden ayudar a prevenir o aliviar el dolor, y se pueden comprar en línea.

Mantener un peso corporal saludable reducirá la presión sobre los pies.

Las personas que se están recuperando de lesiones deben asegurarse de cumplir las recomendaciones del médico sobre cuándo reanudar la actividad extenuante.

No tratar la metatarsalgia, o volver demasiado pronto a las actividades, puede dar lugar a complicaciones.

El dolor puede extenderse a otras partes del pie o del cuerpo, ya que la persona adapta su forma de andar para controlar el dolor.

Causas

En el pie, hay pequeños nervios de los dedos entre los huesos metatarsianos.

Cuando la cabeza de un hueso metatarsiano presiona contra otro, el pequeño nervio queda atrapado entre ellos y comienza a inflamarse. Esto provoca la metatarsalgia.

Poner peso en el pie puede empeorar los síntomas, porque con cada paso los huesos metatarsianos se rozan, aumentando la inflamación del nervio.

Las causas incluyen condiciones médicas específicas y otros factores, pero es sólo poner peso en el pie lo que causa el dolor.

Factores de riesgo

Los factores que pueden contribuir a la metatarsalgia son:

  • Calzado: Los zapatos demasiado apretados alrededor de los dedos pueden causar dolor, o los tacones altos que añaden presión a la bola del pie al ser forzada en un espacio reducido.
  • Tener sobrepeso: El exceso de peso puede suponer una carga para el pie.
  • La edad: La almohadilla de grasa que protege el pie puede adelgazar con la edad, lo que provoca metatarsalgia.
  • Ejercicio de alto impacto: Correr o practicar deportes de alto impacto aumenta el riesgo, ya que los pies absorben grandes cantidades de fuerza.
  • Forma del pie y de los dedos: Tener un arco alto o un segundo dedo más largo que el dedo gordo puede aumentar la presión.
  • Fracturas por estrés: Las pequeñas roturas en los huesos de los dedos del pie pueden causar dolor cuando se aplica presión.
  • Tobillo rígido: Esto puede añadir presión a los huesos metatarsianos.

Algunas condiciones médicas que pueden causar metatarsalgia son:

    • artritis reumatoide, con inflamación de las articulaciones del pie, o gota
    • la diabetes si los pequeños nervios del pie pueden irritarse

una acumulación de líquido en el pie

Un juanete es una protuberancia dolorosa e hinchada que se produce en la base del dedo gordo, debilitando el dedo y aumentando la tensión en la bola del pie.

Los juanetes pueden desarrollarse si una persona usa zapatos demasiado pequeños, o pueden ser heredados. Son más frecuentes en las mujeres que en los hombres. Esto puede conducir a la metatarsalgia.

El neuroma de Morton es un crecimiento de tejido fibroso alrededor de uno de los nervios entre las cabezas de los metatarsos. El neuroma de Morton tiene síntomas muy similares a los de la metatarsalgia y puede causar más tensión en los metatarsos.

Ejercicios

Las estrategias de ejercicio incluyen:

  • ir a nadar o a montar en bicicleta en lugar de hacer deportes de alto impacto y ejercicios que ejerzan presión sobre los pies
  • ejercitar el tobillo y estirar el tendón de Aquiles
  • utilizar plantillas ajustadas (ortopédicas), para reasignar la presión, mejorar la función del pie y proteger la bola del pie

Síntomas

La metatarsalgia provoca dolor en la bola del pie.

El dolor puede ir de leve a intenso. Suele ser más notorio y desagradable cuando el individuo se pone de pie o se mueve.

Puede haber un dolor ardiente o punzante, o un dolor agudo, y puede haber hormigueo o entumecimiento en los dedos del pie. Puede afectar a la zona cercana a los dedos y al pulpejo del pie.

El dolor puede empeorar al flexionar los dedos del pie.

Los síntomas suelen desarrollarse lentamente. Sin embargo, a veces aparecen de forma repentina, especialmente si un aumento del ejercicio supone un esfuerzo para los pies, como correr o saltar.

Cirugía

Si fallan otros tratamientos, puede ser necesaria la cirugía. El tipo de cirugía dependerá del problema subyacente.

La cirugía puede remodelar los huesos para enderezar un dedo en martillo o en garra o puede aliviar o eliminar un nervio atrapado o irritado.

Conclusiones

El tratamiento conservador, como el uso de un calzado más adecuado, suele aliviar los síntomas de la metatarsalgia. Sin embargo, el pronóstico dependerá de la causa subyacente del dolor.

Diagnóstico

El paciente puede acudir a un médico de familia o ir directamente a un traumatólogo o podólogo, un médico especialista en pies.

El médico examinará el pie del paciente y le preguntará sobre:

  • su historial médico
  • su estilo de vida
  • el tipo de calzado que utilizan
  • sus aficiones

También le preguntarán cuándo empezó el dolor, con qué frecuencia se produce, cuándo y dónde, si está empeorando o no, y si hay dolor en otras partes del cuerpo.

Se puede pedir al paciente que camine en una cinta de correr o en una placa de presión para evaluar su marcha. Esto puede ayudar a identificar qué partes del pie están recibiendo presión.

También puede haber pruebas.

Las pruebas de imagen , como una radiografía, una resonancia magnética o una ecografía revelarán cualquier fractura ósea.

Los análisis de sangre pueden detectar posibles enfermedades subyacentes como la gota, la artritis o la diabetes.